Recurrir a la energía solar es una opción que está cada vez más extendida, ya que se basa en una fuente inagotable 100% gratuita como es el sol. Es más, esta solución verde evita depender de los combustibles fósiles y la inestabilidad de los precios que elevan los costes para cualquier vivienda o negocio.
Gracias a las placas solares un hogar se puede llegar a autoabastecer. Los sistemas de energía solar fotovoltaica convierten en energía eléctrica la producida por el sol. El suministro está garantizado en todo momento porque puede ser consumida al momento o almacenada para su uso posterior.
La generación propia de energía para el autoconsumo tiene más ventajas. En este artículo vamos a detallar algunas de ellas y explicaremos cómo funciona exactamente la energía solar fotovoltaica para aprovechar este tipo de energía.
¿Qué beneficios tiene la energía solar fotovoltaica?
A la hora de cambiar de sistema, es lógico plantearse qué ventajas pueden aportar las instalaciones fotovoltaicas. Estas son algunas de las razones para decantarse por el autoconsumo energético:
- Electricidad de producción propia: uno de los más evidentes es reducir los costes del consumo energético del hogar. Con ese tipo de instalaciones se produce electricidad para la calefacción y otros sistemas de climatización.
- Independencia maximizada: un sistema solar fotovoltaico asegura la independencia y evitar tener que estar pendiente de forma constante de la evolución que tienen los precios de electricidad.
- Tecnología madura: la energía fotovoltaica cuenta con sistemas modernos y avanzados que aseguran ser una solución segura y sostenible. Esta tecnología asegura ser una solución eficiente y ecológica para nuestros hogares.
- Inversión confiable: es una opción duradera para despreocuparse durante mucho tiempo. Los sistemas fotovoltaicos son autolimpiables y no necesitan de ningún mantenimiento. Sus accesorias además tienen una larga vida útil.
¿Cómo se transforma la energía solar en energía eléctrica?
Las placas solares juegan un papel fundamental en el proceso. Cuando incide la luz del sol sobre las células fotovoltaicas se crea un campo de electricidad entre las diferentes capas de los paneles que genera la corriente eléctrica continua.
Este proceso se encarga alimentar la red eléctrica de las viviendas. Mediante un inversor, se transforma la corriente continua en corriente alterna que sirve para que funcionen los electrodomésticos y el resto de los aparatos que tenemos en nuestras casas.
Una duda que suele surgir es qué ocurre en los días nublados. El flujo eléctrico será menor y se reducirá la producción de energía al haber menos luz solar. Pero los sistemas fotovoltaicos hasta en esos casos siguen produciendo energía, aunque obviamente no tanta como cuando inciden los rayos directamente.
Instalación sencilla y en poco tiempo
Colocar un sistema fotovoltaico en una vivienda resulta relativamente sencillo. Dada nuestra experiencia, la instalación se puede realizar con éxito en apenas dos o tres días.
Previamente a la realización de los trabajos en la vivienda, se habrá decidido si va a ser un montaje en el techo o una instalación en la fachada. El profesional que se vaya a encargar de hacerlo lo habrá tratado contigo en función de la situación y características que tenga tu vivienda.
Sea una u otra opción, siempre va a haber unos componentes con los que cuenta todo sistema fotovoltaico. Estos son todos los necesarios y alguna opción recomendable para completarlo:
- Módulos fotovoltaicos: las placas son las que generan la electricidad cuando incide la luz solar. Estos paneles solares fotovoltaicos se colocan alineados hacia la mejor orientación e inclinados para un mayor aprovechamiento.
- Inversor: se encarga de transforma la corriente continua generada por la energía solar en corriente alterna para que pueda servir de electricidad para la vivienda. Asegura el sistema sea eficiente y funciona en óptimas condiciones.
- Almacenamiento de la batería: la electricidad que se genere se puede almacenar. Contar con una batería asegura sacar el máximo provecho al sistema y guardar el exceso de electricidad para su uso en otro momento.
- Sistema de control: está integrado dentro del propio inversor. De esta forma, registra todos los datos de consumo del contador y, en base a ello, gestiona el envío de la energía para un funcionamiento eficiente.
- Medidor de energía: es un aparato aconsejable para controlar el rendimiento del sistema solar fotovoltaico y también en consumo energético que se produce en la vivienda. Es un complemento muy útil al sistema de control.
Costes de la energía solar fotovoltaica
El precio de un sistema de energía fotovoltaica va a depender de varios factores, pero sobre todo del número y categoría de los componentes que se elijan. Es algo decisivo para calcular el coste de la instalación porque luego no genera ninguno ni por su funcionamiento ni por tareas de mantenimiento o limpieza.
Es una solución adecuada si lo que se busca es reducir al mínimo lo que se paga por la electricidad. Este sistema basado en energías limpias, además, es válido para casi todos los casos tanto si hablamos de viviendas de nueva construcción como para incluirlo en proyectos de reforma.
Si tienes en mente las energías renovables y te estás planteando las instalaciones solares en tu hogar, puedes consultarnos sin ningún compromiso. Nuestros especialistas son los que mejor te van a aconsejar, tras conocer y evaluar las particularidades de tu vivienda. Así podremos hacer la recomendación más ventajosa según tus necesidades.